Osteosarcoma y su cercana relación a afecciones artríticas y reumatológicas

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El osteosarcoma es el tipo de cáncer de hueso más común que hay. Es especialmente impactante ya que afecta sobre todo a niños y adolescentes, pero en su mayor parte de los casos se llega a combatir.

Los temas de cáncer y sobre todo de cáncer infantil son siempre angustiantes. Esta no es una enfermedad común, por eso la información de cualquier nuevo caso se extiende con rapidez y parece más habitual de lo que es.

El cáncer de hueso se produce por la aparición de células malignas en la estructura blanda o dura del hueso. Hay varios tipos de cáncer de hueso, según la parte del hueso donde se inicia.

El osteosarcoma o sarcoma osteogénico es el más común, afecta sobre todo a niños en etapa de crecimiento y en menor medida en la vejez.

Diferentes tipos de cáncer de hueso

En los huesos hay células dedicadas a hacer crecer los huesos y repararlos en caso de traumatismos, son estas las que se vuelven malas y originan este tipo de cáncer.

“Nuestros huesos no son una estructura rígida, están vivos, crecen y también enferman” explica José Antonio López Martín el oncólogo del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid.

Hay varias formas en las que puede originarse un cáncer en los huesos. Si la alteración de las células se inicia en el centro del hueso, la parte blanda, el tuétano, se llama mieloma y es muy poco común.

Si se produce en las células que forman la parte dura, el hueso exterior, se llama sarcoma. A su vez hay varios tipos de sarcomas, todos son muy minoritarios, aunque menos que el mieloma.

La metástasis es la forma más habitual de que aparezcan células malignas en los huesos. Es un cáncer iniciado en otro órgano y cuya células tumorales se han extendido y se han desplazado por el torrente sanguíneo a los huesos.

Causas

La causa  de que algunas células se malignizan en el hueso aún no está clara. Se ha comprobado que unos tienen un origen hereditario, pero son una pequeña parte.

Y si es algo genético, en el sentido de que su origen es una alteración de los genes que controlan la multiplicación de las células. La mayoría de casos se detectan en los huesos largos, junto a la rodilla o el hombro.

Lo que sí se ha constatado es que la edad es un factor importante, ya que afecta especialmente a niños y en un 10% de casos, se da en adultos de más de 60 años. Por estadística, suele ser más frecuente en niños que en niñas.

Hay estudios que apuntan que la colocación de implantes metálicos permanentes tras una fractura podrían aumentar el riesgo en personas con otros factores de riesgo. Este tipo de cáncer se produce sobre todo en los huesos largos, el fémur y la tibia o el húmero.

Tratamiento del osteosarcoma

“Todos los tipos de osteosarcomas requieren un abordaje en un centro con experiencias  y que reúna varias disciplinas: radiólogos, cirujanos, médicos especializados en radioterapia, ortopedas y todos coordinados por los oncólogos” aclara el doctor.

Para confirmar el alcance de la enfermedad y si son células malignas se harán diferentes pruebas:

–   Un escáner

–   Una resonancia magnética

–   Una biopsia

“La experiencia del especialista que realiza la biopsia es fundamental pues permitirá  que luego el sarcoma pueda tratarse adecuadamente por los cirujanos

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