Oncología Espiritual: “La atención médica al cuerpo, alma y espíritu”, la disciplina de la Dra. Edna Mora

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Este concepto es cada vez más incluido en los procesos de atención en centros oncológicos.

Escuchar a un médico hablar de espiritualidad no es común, pero la Dra. Edna MoraCirujana Oncóloga e Investigadora del Centro Comprensivo de Cáncer de la Universidad de Puerto Rico (CCCUPR), ha compartido con la Revista de Medicina y Salud Pública una disciplina que va más allá de las religiones, conocido como la Oncología Espiritual. 

La especialista aclaró que no se trata de religiones, sino de algo universal que une al alma con el cuerpo, ya que el ser humano es cuerpo, alma y espíritu, y que el concepto surgió cuando entendió que había algo que faltaba al momento de atender al paciente, porque en su opinión, la oncología espiritual se refiere a esa parte en la que “el ser va más allá del cuerpo y el alma. Es esa parte que no podemos observar, pero que es sumamente importante en todos los asuntos de la vida, la oncología espiritual se basa en buscar que el paciente pueda atender asuntos espirituales dentro de su proceso de diagnóstico y tratamiento”.

Incluso, según lo informó la oncóloga destacada en la investigación científica del cáncer triple negativo en Puerto Rico, la American Society of Clinical Oncology ha reconocido este concepto desarrollando guías para orientar a los especialistas y que estos a su vez puedan compartirlo con médicos primarios, enfermeros y pacientes.

“Mucha gente utiliza el término de curarse y sanar como lo mismo y en realidad, son bien diferentes. Cuando sabemos sobre Oncología Espiritual, vemos la curación como ese proceso en donde el cuerpo que ha tenido una enfermedad, por la razón que sea, se expone a unos tratamientos donde la enfermedad se va y eso es curación, pero eso no es sanación, no es equivalente a sanación, porque hay pacientes que no se curan, que su enfermedad no se va, y esa enfermedad ha sido un proceso para que ellos sí sanen, porque la sanación es espiritual”, abundó. 

Últimas etapas de la vida: diagnóstico y atención

“En mi carácter personal, yo entiendo que Oncología Espiritual  se debe atender en todas las fases de diagnóstico y tratamiento del paciente, porque la espiritualidad afecta, ¿cómo vemos todas las cosas, cómo las sentimos y cómo reaccionamos a ellas? Así que un paciente que viene a hacerse una biopsia o una cirugía también tiene una ventaja si, dentro de su tratamiento holístico, incluye su espiritualidad”, destacó la Dra. Mora. 

La especialista indicó que es importante atender la espiritualidad dentro de la oncología, y por esa razón con el pasar del tiempo más profesionales han integrado este tipo de atención dentro de la atención clínica al paciente, integrando, por ejemplo, palabras de aliento. 

Un proceso que reta a todos: médicos, enfermeros y pacientes 

En su relato, la doctora Mora destaca que la sanación es esa exploración de esa energía, de ese apoyo, de esa visión, de lo que es el ser humano, “que no es el cuerpo ni es el alma, pero que sabemos que existe, porque en nuestra mente, nosotros lo tenemos inculcado, pero no lo ejercitamos”. 

Por ello, enfatizó en que muchos pacientes tal vez no se curen, pero sanan desde el punto de vista espiritual, tanto con él mismo como con su familia y entorno. 

“Usualmente, la espiritualidad la vemos más expresada en situaciones donde la persona está muriendo, donde un familiar está muriendo, o ha muerto, o un amigo; porque nos retratamos en esa situación, es decir, vemos que necesitamos desarrollar esa espiritualidad, porque cuando la conocemos vemos las cosas de otra manera”, expresó la especialista. 

La doctora Mora, con voz calmada, destacó que ella no conoce la espiritualidad en su máxima expresión, pero sí está en un proceso de aprendizaje constante, porque ha sido testigo de cómo los pacientes se sienten más apoyados. 

En su trabajo, la especialista explicó que se incorporan otros aspectos en dónde se le estimulan otras destrezas para que el paciente vea la situación desde otro punto de vista.

“Esto es tanto para el paciente, como para los familiares, y pienso que puede atender la situación con más tranquilidad, con más conocimiento, estar más abiertos a las alternativas y tomar mejores decisiones, y que eventualmente no nos tenemos que preocupar cuál va a ser el resultado final porque ya estamos en ese camino que es la enfermedad en ese caso, pues nos da la oportunidad de desarrollarlo y de compartir la Oncología Espiritual”, finalizó.