Algunas condiciones que se desarrollen en el aparato reproductor pueden ser algo extrañas e incluso infrecuentes, sin embargo, cuando se presentan existen claras señales e indicios de la patología
El cáncer vagina es un tipo de afección no muy frecuente y se desarrolla en el tracto muscular que comunica el lado exterior de los órganos genitales de la mujer con los interiores, se caracteriza por originarse en aquel tejido que recubre la zona también denominada canal de parto, en la mayoría de ocasiones este cáncer se da por la diseminación de células malignas desde otras zonas del cuerpo y muy rara vez se origina desde la propia vagina.
Cuando se diagnostica la malignidad a tiempo es posible que un tratamiento pueda recuperar fácilmente la zona y devolver la calidad de vida a la paciente, no obstante, cuando el cáncer se desarrolla en una zona más interna a la vagina puede ser más complejo su tratamiento y recuperación.
Sintomatología
El cáncer vaginal en sus primeras semanas de origen no tiende a dar algunos indicios, pero a medida de que va progresando la paciente puede identificarlo, de acuerdo a la Mayo Clinic, estas son las señales de un cáncer vaginal:
- Sangrado vaginal extraño, se presentan después del coito o menopausia.
- Secreción de la vagina en un estado acuoso.
- Presencia o desarrollo de una masa anormal en la vagina.
- Dolor al ir al baño.
- Dolor pélvico.
- Estreñimiento.
- Necesidad de ir al baño de manera regular.
Tipos de cáncer vaginal
Existen algunos tipos de cáncer que suelen categorizarse dependiendo de la locación o de los órganos, tejidos o superficies que puedan comprometer, estos son los tipos de cáncer vaginal más comunes:
- Carcinoma de células escamosas vaginales: empieza en aquel tejido que presenta algunas sensaciones de escamosidad dentro de la vagina y es la condición más común.
- Adenocarcinoma vaginal: esta patología comienza en las células glandulares del tracto.
- Melanoma vaginal: esta condición se desarrolla en aquellos pigmentos de la vagina.
- Sarcoma vaginal: se desarrolla en aquel tejido conectivo o muscular de la zona.
Es importante que se tengan en cuenta aquellas enfermedades consideradas extrañas o infrecuentes, pues aunque no se manifiestan a menudo es necesario que se tengan presentes con el fin de prevenirlas y sobre todo por verle al paciente una recuperación rápido con un diagnóstico acertado y eso se logra con un apoderamiento individual y conceptual de este tipo de enfermedades.
